Gipuzkoa, con un retroceso del 9,3% fue el territorio menos afectado, frente a Bizkaia con un 9,6% y Araba con un 9,5%
No ha habido sorpresas, ni buenas ni malas, respecto al avance de las cuentas del cuatro trimestre de 2020 dadas a conocer por el Gobierno Vasco en enero. Con los resultados de septiembre a diciembre en la mano, el Eustat ha confirmado que el Producto Interior Bruto (PIB) de Euskadi descendió un 9,5% el año pasado. La bajada del empleo con relación a 2019 se situó en un 8,1%. Por territorios históricos, el balance se cierra con retrocesos del PIB del 9,5% en Álava, del 9,6% en Bizkaia y del 9,3% en Gipuzkoa. En enero, con estos mismos datos en la mano, el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, auguró que Euskadi no volverá a los niveles de PIB previos a la pandemia «hasta finales de 2022».
No obstante, cabe hacer una lectura positiva, dado que el resultado del cuarto trimestre de 2020 en relación al tercero presenta un alza del PIB del 0,5% aunque, con respecto al mismo periodo del año anterior, el retroceso fue del 7,6% . El empleo en el último trimestre de 2020 cayó un 6,3%, manteniéndose prácticamente en el nivel observado en el tercero. Esta caída del PIB del 7,6% es inferior a la estatal, que se desplomó un 9,1%, pero superior a la del conjunto de la UE (4,8%) o a la de Estados Unidos (2,4%).
Entre septiembre y diciembre de 2020 todos los sectores, excepto el de la 'Administración pública, educación, sanidad y servicios sociales', que creció un 1% respecto al mismo periodo de 2019, presentaron resultados negativos. Así, la industria retrocedió un 7,2%, la construcción un 8,2% y los servicios un 7,1%, en este último caso con especial incidencia en el comercio, hostelería y transporte, que se desplomaron un 12,8%. Las exportaciones descendieron un 14,8%. Por lo que se refiere al consumo privado, cayó un 9,1%, en tanto que el público se incrementó un 7,2%.
Evolución en 2021
La confirmación del dato de la caída del 9,5% para el conjunto de 2020 ratifica la previsiones adelantadas por el Gobierno Vasco en enero respecto a 2021. El Ejecutivo autónomo en aquella ocasión rebajó la previsión de crecimiento del 8,9% a un 8,6%. Este año, según los análisis del Gobierno Vasco, transitará de un crecimiento cero en el primer trimestre a un repunte del 21,3% en el periodo abril-junio, cifra que tiene su explicación en que compara con el momento más duro de 2020. En el tercer trimestre, la economía vasca crecerá un 7,7%, un poco por encima del 7,4% interanual que registrará en el último cuarto del año. Estas previsiones, como señaló Azpiazu en enero, retrasan hasta 2022 la recuperación del PIB a niveles previos a la pandemia.